lunes, 28 de febrero de 2011

LOCURA ya

Era un cuero no demasiado duro, con un poco de flexibilidad pero resistente al cruel deterioro que sabía de más que iba a provocarles. Las acepté rápidamente. Me quedaban justas pero a la vez un poco holgadas, y aislaban del frío de una manera descomunal. La diferencia entre el exterior y el interior podía ser de más de 15 grados, y la suavidad que causaban a mis yemas cuando disfrutaba recorriendo la suave piel fue el detalle final que me hizo comprarlas. ¿ Por qué no corriese tal suerte siempre que voy a obtener cualquier cosa? No entiendo cómo de las botas solo me conformé con la suavidad que me inspiraban, y de lo demás tengo que complicar todo tanto...QUIERO mis BOTAS

No hay comentarios:

Publicar un comentario