El de verdad

Y ahora el de verdad. El callado de repente suelta un quejido, cargado de pesadumbre por lo imposible de la historia dado los tiempos que corren. La subjetividad de mi mirada ha cambiado como siempre lo hace en la estación estival, el color de mis ojos se vuelve mas intenso, mas lleno de ti...me lleno de charcos, de work, de palabras cargadas de mimosura...me lleno de dolor también, porque evidentemente para mi no es fácil enfrentarme a todos estos sentimientos escondidos bajo el baño de pablito en invierno, para que la caca no huela...pero ahora en la playa no tengo nada capaz de hacer desaparecer esas gotas llenas de incertidumbre lo cierto es que no poder terminar de escribir este capítulo es la raíz y la desinencia de este mi problema.