jueves, 15 de septiembre de 2011

Plan vigor-oso

Después de un verano cargado de per-ico, oso, ico, ato, per-ato, de enzimas, de hormonas tiroideas, glucosa, y mil y un conceptos nuevos, me doy cuenta de que me gusta mucho aprender sobre mi cuerpo, pero que nunca podría poner esos conocimientos en práctica porque en cuanto suena la palabra sangre me descompongo en mil pedazos, con ataques de risa y flojera loca. Y esa nueva afición peliculera que me habéis pegado entre todos, y ese hambre voraz de aprender nombres de actores para no estar tan por detrás vuestra en las conversaciones cinéfilas... Necesito empaparme de España porque sé que la echaré de menos.
Y es que el tiempo me azota con ostias de primer grado, y lloro, lloro porque la decisión final cada día está más cerca, y yo no puedo parar de pensar en qué haré, en qué pruebas me encontraré antes de enfrentarme en la decisión... No quiero que nada se interponga en mi camino, no obstante pienso que es algo inevitable... que los obstáculos también son sombras agradables en el camino para descansar... ¿Lo malo? Que el camino es largo, pero el tiempo para recorrerlo extremadamente corto, y de tanto descansar podemos no llegar a la meta... Por eso creo que lo hago todo corriendo, ese fatídico miedo a que no me de tiempo...quién me conozca un poco lo sabe
NO ME DA TIEMPO.
Aún sigo aquí. Un año es mucho y muy poco tiempo para ser felices y enseñarnos mucho. Al fin y al cabo, esa es la esencia de la vida, el ser una gran persona e intentar aprender tanto de los demás como ellos de ti. Un blog un poco caca el de hoy, lo reconozco. Esta vez no tiene dobles sentidos ni interpretaciones, porque va de mí y sólo de mí.

1 comentario:

  1. Pese a que pienses que es una caca de blog el de hoy, yo te doy las gracias de corazón por el blog, por ti y por tu vida compartida

    ResponderEliminar