Se me va la mano. Hacia la izquierda; más que un hábito, lo considero un código casi indescifrable. Ten una mente exactamente igual que la mía y tendrás una remota posibilidad de averiguarlo. Yo tampoco entiendo tus códigos, no he corrido la suerte del azar. Por suerte, me compensa con sorpresas, escondidas en cajas gigantes que espero nunca estén bajo la cama...Lo mejor de una persona es cuando te muestra su ser poco a poco, paso a paso, de forma que, cuando tu vida se acaba, sientes que te faltan cosas por saber. Y no hay cosa que más rabia le de a una persona curiosa que no saber todo lo que puede y está a su alcance...Quizás es eso lo que me engancha tanto.
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