Quién podría entender que el corazón no está en su sitio, no está en el lado derecho, pero es que en el izquierdo tampoco lo encuentro. Mi vueltas entre el nórdico de cuadros monocromático, son más de las 5, ¿cuántas horas llevo buscando conciliar el descanso? Apenas a las 9 ya no tengo más ganas de yacer, quiero ordenar, primero el entorno, para facilitar que el interior quede como una patena. Pero el entorno no quiere. Y con la manía del orden mental, estudiantil, sin el entorno limpio nunca empezaré con el interior...y así llevo ya alguna que otra semana, con el ojo más "cagao" que nunca joder.
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